La Renga en Buenos Aires, 9 y 10 de Julio

Se despertó el León...

 

Y el Domingo tuvimos revancha... Se resolvieron los problemas de sonido, y el recital ahora sí estuvo a la altura de la circunstancia. Esta vez salimos con una sonrisa de oreja a oreja del show, y con la alegría de haber disfrutado con los mismos de siempre una verdadera fiesta de rock.

 

Esta vez le tocaba el turno de abrir la velada a las bandas La Percanta, Huaykil, La Negra, Maldita Suerte, Ruta 69 y Guillermina. Algunas ya conocidas por su relación con La Renga, y otras que tuvieron la oportunidad de hacerse conocer. Una vez mas, entramos un poco sobre la hora y no tuvimos oportunidad de verlas, por lo que el comentario se los debemos.
Después de finalizado el show, nos enteramos que hubo algunos enfrentamientos entre gente que no tenia entrada y la seguridad de Vélez, pero bueno, no vamos a caer en la fácil de decir que hubo fallas de seguridad o algo por el estilo... en este caso, gran culpa la tuvo la gente, que en realidad fueron unos pocos inadaptados.
Con la puntualidad como nuevo requisito, el show volvió a arrancar a las 19:00 con las mismas imágenes en las pantallas, y el arranque Atulado-Detonador de Sueños-Las Cosas que Hace, aunque repetido, sonó contundente. La lista de temas en general fue la misma, aunque nos traería algunas sorpresas más que agradables.
Se escucharon, como en la noche anterior, En El Baldío, Bien Alto (impresionante el pogo que desata la armónica de Manu) y Cuando Vendrán. Ahí nomás, uno de los momentos más emocionantes del doblete rengo en Vélez... "vamos a tocar una viejita" dijo el Chizzo, y para locura de los mismos de siempre (y aunque mucha gente no la conocía) sonó un tema queridísimo por los fans y que hacia mucho, pero mucho tiempo que no tocaban: Cortarla y Olvidarla... y realmente nos hizo olvidar del mal sonido del Sábado, del cansancio, de todo... si hubiera terminado el show en ese momento, igual hubiéramos sido las personas más felices del mundo.
Luego, siguieron pasando los temas, como El Rastro de la Conciencia, Lo Frágil de la Locura, un solo de batería del Tanque que no recordamos bien cuando fue y el temazo El Cielo del Desengaño. Un rato antes, como el Viernes, paso el Eli de Gardelitos para hacer Ser Yo en homenaje al Korneta.
Llegó el otro homenaje, esta vez al Carpo con Viva Pappo, y ahora sí sonó emocionante con Luciano Napolitano haciendo un solo que sumado a las fotos de Pappo en la pantalla, nos hizo poner la piel de gallina.
La Balada del Diablo y la Muerte (¿no será tiempo de sacarla un tiempo de la lista de temas?) hizo prender todos los encendedores, y llegó otro de los momentos especiales: El Viento que Todo Empuja, en versión primero reggae y después rock.
Paso La Razón que te Demora y los caños se escucharon en todo el estadio con "El Final es en Donde Partí".
Y todavía quedaban sorpresas. Se vino el primer bis, con Panic Show (y el Chizzo usando la viola de una víctima de Cromañon) haciendo saltar a todo el estadio. Y bueno... estoy pensando que palabras usar para describir lo que generó "Pscilocybe Mexicana", y estoy llegando a la conclusión que no hay. Realmente in-cre-íble.
"Vamos con otro vals", bromeó el Chizzo, y con el Fachi (Motor Loco) de invitado comenzó la intro de El Revelde, con el Tete (que rompió la costumbre y no uso en este recital su típico jardinero) haciendo su baile.
Para el último, quedaría El Rey de la Triste Felicidad y Hablando de la libertad, en donde se prendió una bengala y la banda paró todo, y el Chizzo habló dejando bien claro que por respeto, nunca más se va a prender una bengala en un recital de La Renga. El tema siguió y así termino un show que nos dejó a todos más que satisfechos, y con la felicidad de haber vuelto a vivir un banquete, de esos que solo La Renga sabe dar...

 

Seguramente nos olvidamos de muchas cosas, de muchos momentos, de muchas imágenes... pero es imposible trasladar en un papel lo que se vivió en estas dos fechas, que como ya dijimos tuvieron un gusto especial. Y como dijo el Chizzo en algún momento, esperemos que Cromañon sirva, al menos, para unirnos todos en esta gran familia del rock.

 

 

Andrés Moreno / www.larengapage.com.ar